Bancos de semillas: una solución para la Seguridad Alimentaria
En los bancos de semillas se encuentra la memoria vegetal del planeta. Cientos de repositorios guardan, en bóvedas acorazadas, miles de especies que funcionan para la investigación y seguridad alimentaria.
¿Para qué sirven?
Seguridad alimentaria: guardar copias de las semillas necesarias en caso de escasez, catástrofes o desaparición de cultivos.
Investigación: experimentación e identificación de especies, repositorios genéticos, biotecnología y conservación.
¿Cómo funcionan?
Los bancos tienen dos bóvedas.
• Colección base: conserva las semillas a largo plazo. No está disponible para retiros ni transacciones.
• Colección activa: las semillas se pueden retirar para investigación, intercambio con otros bancos, por terceros o para control.
¿Quiénes obtienen las semillas?
El protocolo de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, FAO, es similar al de entidades como Bioversity International, universidades e instituciones.
¿Qué semillas se guardan?
Técnicamente, cualquiera. Depende de si el banco es de investigación, de especies endémicas, copia de respaldo, comunitario, jardines botánicos, etc. Según la FAO, en 2010 existían alrededor de 1.750 bancos en el mundo.
• Semillas no ortodoxas o recalcitrantes (como aguacate, mango, lichi) resisten poco tiempo en los bancos y deben ser replantadas para obtener nuevas muestras.
• Semillas ortodoxas (como maíz, trigo, arroz, garbanzo, dátil o algodón) soportan siglos.
¿Cómo es el proceso?
Recolección:
• De cultivos, invernaderos u otros bancos. El color indica la madurez.
• Se guardan en bolsas de plástico o papel.
Limpieza:
• Se eliminan desechos, semillas dañadas, infectadas o tomadas por error.
• Pruebas, como rayos x, confirman que haya embriones viables.
Secado:
• Se baja la humedad extendiéndolas bajo techos de policarbonato.
• Se secan en cámaras de aire caliente.
• Tras el secado se hacen pruebas de humedad.
Envasado:
• En envases de vidrio sellados con calor.
• En bolsas metalizadas selladas al vacío.
Registro:
• Se rotulan datos como el lugar de recolección, la fecha y la información taxonómica.
• Se usan códigos de barras para control digital.
Almacenamiento:
• Bóveda base con humedad de 3 a 7% y temperatura de -20 º C.
• Bóveda activa con humedad de 10% y temperatura de -10 º C. Según la ley de Harrington, por cada – 5 º C se duplica la longevidad de las semillas.
Pruebas de germinación:
• Se usan muestras para conocer la mejor forma de plantar.
• Se estudia si las semillas sobreviven al proceso.
Los bancos más grandes del mundo
• El Banco Mundial de Semillas de Svalbard, en Noruega, conocido como la ‘bóveda del fin del mundo’, aloja 984.547 muestras de 6.005 especies de 243 países. Funciona como copia de seguridad de otros bancos.
• Debido a la guerra en Siria, el Centro Internacional de Investigaciones en Zonas Áridas retiró, en 2015, 130
de sus 325 cajas. Fue el primer retiro del Banco.
El Consorcio Internacional de Centros de Investigación Agrícola (CGIAR) tiene 768.576 muestras en 11 bancos. Tres de ellos en América.
• Centro para el Mejoramiento de maíz y trigo (México): 153.000 muestras.
• Centro Internacional de Agricultura Tropical (Colombia): 69.000 muestras.
• Centro Internacional de Papa (Perú): 18.000.
• El Banco de Semillas del Milenio del Jardín Botánico de Kew, en Reino Unido, puede guardar 75% de
las semillas conservables del mundo. Hoy tiene 39.000 especies.
• El Sistema Nacional para el Germoplasma de las Plantas (NPGS), del Gobierno de EE. UU., tiene alrededor
de 380.000 ejemplares de unas 8.700 especies.